De nuevo, las vacaciones de verano llegan a su fin y septiembre trae consigo uno de los momentos más importantes del año: la vuelta al colegio. El reencuentro —o la primera vez de los que empiezan— con la mochila, los compañeros, el profesorado, las aulas… Un tiempo de nervios y expectativas al que hay que adaptarse poco a poco con nuevos horarios y hábitos, y mucha paciencia.
Consejos para preparar la vuelta al cole
Durante las vacaciones de verano, la hora de levantarse, las comidas, el baño o la hora de dormir se retrasan con respecto al resto del año, ya sea por la luz solar o porque no hay obligaciones. Con la vuelta a la rutina, necesitamos ajustar el horario de las comidas y, sobre todo, del sueño, por lo que conviene empezar al menos una semana antes de iniciar las clases. El objetivo es irse a la cama antes para madrugar, respetando las horas de descanso necesarias para rendir al día siguiente.
Esta es una recomendación que deberíamos seguir durante todo el año, pero que solemos saltarnos en época estival. Picar entre horas, las bebidas azucaradas y los helados contra el calor, fritos o menús de comida rápida mientras viajamos…, son prácticas que debemos considerar excepcionales y retomar la ingesta de fruta, verdura, pescados y legumbres, principalmente. Conviene también explicar a los niños de la casa la importancia de desayunar de manera saludable para afrontar la jornada con energía.
Cada niño y adolescente es un mundo. Mientras unos se mueren de ganas de volver a clase, otros rechazan, e incluso temen, el inicio de las clases. Es recomendable sentarse a hablar con nuestros hijos para compartir sus preocupaciones y estimularlos con vistas a afrontar un nuevo curso. La alegría del reencuentro con los compañeros y el profesorado, el deseo de aprender cosas nuevas e interesantes, así como la necesidad de superarse a uno mismo para ganar autoestima e independencia, son algunos de los puntos que podemos tratar en familia para comenzar el curso con actitud positiva.
Es tiempo de libros de textos, cuadernos, carpetas, rotuladores, estuches, mochilas, y también de ropa y calzado nuevo para ir a clase. Anímalos a realizar las compras contigo, así se motivarán e ilusionarán desde antes de empezar.
Si no lo habéis hecho ya, es hora de hacer sitio, retirando aquello del curso anterior que no se vaya a volver utilizar, y preparando los elementos del nuevo año escolar. Otra oportunidad para colaborar juntos, ya sea colgando la ropa del armario, personalizando y etiquetando el material u ordenando cajones y estanterías.
Ya sea la primera vez o no, es bueno acercarse a conocer las instalaciones del colegio o instituto algunos días antes del comienzo oficial de las clases. Un simple paseo en familia puede ayudar, sobre todo a los de Primaria, a ver el lugar con ojos más seguros. Responder dudas y dialogar sobre el regreso a las aulas in situ, también.
Pasar tiempo con amigos de clase, uno o dos días antes de coincidir en el cole, les ayudará a establecer lazos de confianza y a querer pasar más tiempo en compañía de otros.
Fuente : https://es.literaturasm.com